El menú de vuestro día siempre lo váis a recordar con cariño, si además de eso, está diseñado para acompañar a vuestra invitación y al resto de complementos, entonces es cuando la boda queda preciosi preciosi y todo el mundo se enamora.
En el restaurante, elegir la mantelería y decoración con el mismo estilo, lo cual acabará de redondear una escena de ensueño que quedará grabada en la retina de vuestros invitados.